- 250 gr de harina.
- 250 gr de azúcar.
- 250 gr de mantequilla.
- 6 huevos.
- 2 cucharadas de café soluble.
- Se derrite la mantequilla por un lado.
- Se separan las claras de las yemas. Se baten las claras hasta alcanzar el punto de nieve y se va agregando la mantequilla poco a poco a hilo fino, el azúcar y el café.
- Después se va añadiendo la harina previamente tamizada poco a poco y se sigue trabajando con movimientos envolventes para no bajar la mezcla ni obtener grumos.
- Sabremos que la masa está en su punto cuando no se quede pegada en los dedos.
- Se hacen porciones, dándoles forma de galletas. (se pueden hacer uno churros gruesos e ir cortando en rodajas, así saldrán más o menos todas iguales).
- Se prepara una fuente especial para horno a la que se le unta un poco de aceite y se le espolvorea un poco de harina para evitar que las galletas se peguen.
- Se ponen encima las galletas con espacio suficiente entre ellas, pues hay que tener en cuenta que en el horno aumentarán de tamaño.
- Se pone el horno a temperatura media-alta, se introducen las galletas y se dejan hasta que estén doraditas. (doradas, no quemadas).
- Cuando estén doradas, se sacan del horno se dejan enfriar y se pueden decorar con un poco de azúcar glass si se quiere.
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